Por el PBI revisado, el Gobierno podrá gastar $ 30.000 millones más en 2016 (El Cronista)
El Gobierno confirma, una y otra vez, que la meta de déficit primario para este año, de 4,8% del PBI, es un objetivo realizable. Pero prefiere eludir recordar el valor absoluto que había indicado que se llegaría, un rojo de $ 358.000 millones, que, según el PBI antes de la revisión que llevó a cabo el Indec, representaba el 4,8% del producto. Sin embargo, las modificaciones puestas en prácticas por el instituto de estadísticas dan una holgura mayor para 2016: según la estimación del PBI que se haga, de cómo terminará el año, el margen para incrementar el déficit primario suma unos $ 32.500 millones adicionales, cifra nada despreciable en un período en el que los pesos escasean. Los nuevos datos de la economía, con el PBI revisado, arrojaron que 2015 tuvo una expansión en la economía menor a la que se había estimado anteriormente. Sin embargo, el impacto de los precios lleva a que el PBI nominal actual (es decir, medido en precios corrientes) sea mayor al que se había previsto de manera inicial.
Hacienda tendrá un monitoreo diario del dinero que entra al blanqueo (El Cronista)
A pesar del éxito que pronostican los economistas sobre el blanqueo de capitales, en el Gobierno prefieren manejarse con cautela. El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, no se mueve de lo que dijo: u$s 20.000 millones. «Ese es el número que dijo el ministro en su momento y después nunca más habló de montos», reconoce una fuente oficial. De todas formas, en el Ejecutivo especulan con septiembre para tener una aproximación más cercana de lo que finalmente puede pasar. Es cuando cierra la suscripción para el Bono a 3 años (Bonar 2019) que dispuso el Gobierno. El segundo bono es a 7 años (Bonar 2023) y tiene un monto máximo de u$s 5000 millones. Para este título habrá tiempo para suscribirse hasta el 31 de diciembre. De todas maneras el Gobierno podrá monitorear diariamente cuánto dinero ingresa por este bono, y también tendrá un seguimiento semanal para el Bonar 2019.
Apuran puesta a punto para ofrecer fondos comunes a los que blanquean (El Cronista)
Las industrias de fondos comunes de inversión y de la construcción trabajan a contrarreloj para llegar a tiempo con alternativas de inversión sólidas que logren atraer al menos parte de los capitales que se exterioricen durante el blanqueo. Los primeros fondos cerrados inmobiliarios están siendo pulidos por los privados, mientras que otros fondos necesarios para dirigir el dinero ya están dando los primeros pasos en la Comisión Nacional de Valores (CNV) para obtener una rápida aprobación que les permita captar dinero antes del 31 de octubre, límite para quienes declaren dinero y divisas en efectivo. La semana pasada la sociedad gerente Allaria Ledesma Fondos y Casa Arg anunciaron la presentación ante la CNV del fondo «de parking» con el que van a captar el dinero que luego redirigirán a un fondo cerrado de 9 proyectos inmobiliarios. La firma Consultatio, que engloba dentro de su grupo a una constructora y una administradora fondos comunes, admitió que tiene planes avanzados. IRSA, que también está asociada a una administradora de fondos comunes a través de su participación en el Banco Hipotecario, está en una posición igual de cómoda para lanzar su propia oferta. Otras desarrolladoras consultadas por este diario también comentaron planes de alianza con fondos para llegar a tiempo.
BCRA recibe hoy a pymes (piden bajar comisiones) (por Ignacio Olivera Doll – Ámbito Financiero)
Después de ejercer durantesemanas una insistente presión mediática sobre los bancos y el Gobierno, los empresarios pyme lograron una reunión para hoy a la mañana en las oficinas del presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger. Los representantes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) acercarán una lista de pedidos para que, mediante una normativa oficial, se elimine la comisión del 1,5% que cobran las entidades financieras a los comercios en cada pago con débito y reduzcan a la mitad la que rige para las compras con tarjetas de crédito. Los empresarios vienen de realizar una intensa campaña para alertar sobre los altos costos que complican la actividad comercial y sus ventas minoristas, con comunicados, reparto de folletos en la vía pública y hasta la instalación de un stand frente a la sede del Central. El encuentro se realizará hoy por la mañana en Reconquista 266 y tratará los principales puntos que CAME ya adelantó la semana pasada en un memorando, en el que consideró «excesiva» la transferencia de dinero de los comercios a los bancos por comisiones de pagos con tarjetas. Según pudo confirmar este diario, la mesa chica de Federico Sturzenegger dialoga diariamente con la Comisión de Defensa de la Competencia que depende de la Secretaría de Comercio para abaratar los costos de financiamiento. En el Central consideran que hoy los comercios tienen buena parte de la razón en su reclamo y consideran que bajar los cargas financieras «es una prioridad»: en el corto plazo, anticipan, lanzarán normas a favor de la «portabilidad bancaria», que es el derecho que tienen los clientes a elegir en qué entidad financiera manejar su dinero, para que sea más fácil pasarse de un banco a otro.
Proponen una revisión integral de las tarifas en audiencias públicas (La Nación)
Frente a la maraña de procesos judiciales abiertos, que impiden al Gobierno avanzar con los aumentos de tarifas de electricidad y gas que había planteado, el grupo de ex secretarios de Energía propuso ayer encarar los procesos de «revisión tarifaria previstos en los marcos regulatorios» de esos servicios, lo que supone una reestructuración integral de precios en las distintas etapas. «Para esas revisiones son necesarias las audiencias públicas. Si fuera necesario y conveniente disponer aumentos a cuenta, los mismos también deberían cumplir dicho requisito; y es lógico que ayudaría a superar el conflicto actual acelerar el proceso de normalización de los entes reguladores del gas y de la energía eléctrica», que debería encararse «sin demoras» y en un proceso de selección de «los mejores candidatos no alcanzados por las incompatibilidades vigentes», completa la declaración difundida anoche por los expertos Emilio Apud, Julio César Araoz, Enrique Devoto, Alieto Guadagni, Jorge Lapeña, Daniel Montamat y Raúl Olocco. El documento recuerda que el grupo había advertido en distintas oportunidades, desde 2008, la necesidad de remover las distorsiones de precios y tarifas que la política de Cristina Kirchner produjo en el sector energético, sin que se aceptaran las críticas. «Uno de los escollos más importantes a remover es el desastre en los precios y tarifas heredados luego de 12 años de populismo energético», señala en su introducción. «Entendemos que el sinceramiento tarifario es necesario e ineludible por las consecuencias negativas que provocan a los usuarios en la calidad de la prestación de los servicios públicos que reciben; porque hay insuficiencia en las inversiones y quebrantos en las empresas prestadoras, y por el impacto negativo en la macroeconomía que los subsidios energéticos ocasionan», agrega.
Créditos UVI: hubo ya 100 mil consultas, pero aún pocas operaciones (Ámbito Financiero)
Desde que se lanzó la línea de créditos hipotecarios UVI en abril, los bancos han recibido más de 100.000 consultas por estos instrumentos. Sin embargo, el contexto inflacionario que afecta a la economía genera que la demanda de estos créditos se mantenga cautelosa, en torno a u$s50 millones. Estos préstamos que ofrecen las distintas entidades financieras mantienen una tasa fija que se ajusta mediante la aplicación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), que sigue la evolución del Índice de Precios al Consumidor que realiza el INDEC, lo que obstaculiza que los principales interesados busquen contraer deudas, ya que los montos solicitados se ubican, en promedio, entre los $850.000 y $1.000.000. Fuentes bancarias comentaron que «el mercado financiero argentino es chico». «En un contexto inflacionario, la demanda por los créditos a largo plazo disminuye». La mayoría de los préstamos que ofrecen las distintas entidades van desde los 15 a los 20 años, por lo cual, en un contexto de incertidumbre, hay mayor aversión por acceder a estos planes de financiamiento. De todos modos, consideraron que «una vez que se confirme que la inflación se ubique por debajo del 2% mensual, la demanda comenzará a aumentar».
La Iglesia insistió en su reclamo al Gobierno por el desempleo (La Nación)
La tradicional peregrinación al santuario de San Cayetano tuvo este año un fuerte e inusual condimento político. Por un lado, la Iglesia volvió a transmitir un duro mensaje sobre el desempleo y la desigualdad social en la Argentina. Por el otro, la movilización masiva que cada año colma las calles de Liniers por primera vez estuvo sumamente politizada, con la presencia de numerosas organizaciones sociales y sindicales y la militancia kirchnerista, que se mezclaron con los fieles y marcharon contra el Gobierno. Breve pero contundente, el emisor del mensaje de la Iglesia fue el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, que en su homilía llamó a la «compasión» con el prójimo y reclamó «progreso, paz y justicia». Poli también apuntó contra los que actúan como mensajeros papales, aunque no especificó a quiénes se refería. «Ustedes saben. No se confundan. Una foto o un encuentro con el Papa no te hace vocero, amigo ni misionero si no practicamos los mandamientos de la compasión y la misericordia con el otro, que no es mi enemigo, sino mi hermano, mi semejante y mi prójimo», dijo ante la multitud desde un pequeño escenario montado frente a la parroquia.
OPINIÓN / ANÁLISIS
La creciente obsesión: atraer inversiones
Por Carlos Pagni – La Nación
La inauguración de los Juegos Olímpicos fue la excusa para que Mauricio Macri se reuniera con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y con Michel Temer, el presidente interino de Brasil. En 48 horas, el Presidente dialogó con representantes de los países más determinantes para la Argentina. La agenda abarcó desde la crisis venezolana hasta las nuevas turbulencias que sacuden a Temer, alcanzado desde el viernes por el escándalo de Petrobras. Como toda política exterior es política doméstica, Macri ordenó las conversaciones alrededor de su obsesión: la atracción de inversiones para acelerar el despegue de la economía. Por eso, las entrevistas son una ventana inmejorable para entender cómo está observando el proceso que lidera. Kerry, que pasó por Buenos Aires el jueves pasado, estuvo reunido con Macri en la Casa Rosada. Además, estuvo con la canciller Susana Malcorra en el Palacio San Martín. Las conversaciones fueron absorbidas, sobre todo, por las finanzas. Al secretario de Estado se le explicó con detalle lo que espera la Argentina de Obama en ese frente. Lo más inmediato: que se intensifiquen los intercambios entre la Unidad de Información Financiera (UIF) y su homóloga, la Fincen (Financial Crimes Enforcement Network). El Gobierno espera que esa oficina presione a los argentinos que atesoran dinero no declarado bajo su jurisdicción para que también se plieguen al blanqueo. Sencillo: los Estados Unidos no están entre los países que intercambiarán datos sobre activos ocultos a partir de enero próximo. A Kerry el pedido le sonó conocido: Alfonso Prat-Gay se lo había formulado al secretario del Tesoro, Jack Lew, hace tres semanas, en China. Las relaciones entre la UIF, que conduce Mariano Federici, y la Fincen se acaban de recomponer. El organismo que persigue el lavado de dinero en los Estados Unidos las había suspendido porque el antecesor de Federici, José Sbattella, utilizaba los datos que obtenía para la persecución política. Una práctica propia de ese «Estado policial» sobre el que alertó al país Cristina Kirchner. Macri, y con mayor precisión Malcorra, insistieron ante Kerry en otras urgencias que también Prat-Gay trató con Lew. Por ejemplo, la expectativa de que Washington ayude a que el Club de París mejore la nota de la Argentina. El Club solventa costos de las empresas de países avanzados que invierten en mercados emergentes. Axel Kicillof le pagó, sin negociación, la deuda. Pero, aun cuando en abril se superó el default, no sirvió de nada. Entre otras cosas porque las cuentas nacionales siguieron sustrayéndose, por una decisión del kirchnerismo, a la auditoría del FMI. La dificultad reaparece en las denominadas ECA, Export Credit Agencies, es decir, agencias que financian exportaciones en el marco de la OCDE. La recepción de inversión extranjera choca contra una paradoja: los países asignan a la Argentina una tasa de riesgo de alrededor del 7%, más alta que la del mercado financiero, que apenas supera el 5%. Puesto al revés: si el nivel de intereses que hoy fijan los países fuera realista, los bancos deberían estar cobrando más o menos 12%. Ninguna otra nación de la región presenta esa anomalía. El desbalance está demorando algunos proyectos. Por ejemplo, la central hidroeléctrica Chihuido, que debe realizar en Neuquén un consorcio liderado por Eduardo Eurnekian, con financiamiento ruso. La curiosidad es que la tasa fijada el año pasado desde Moscú, superior al 6%, era conveniente en relación con los riesgos que ofrecía el kirchnerismo. En cambio hoy, con un frente externo despejado, sería más barato pedir esos fondos al mercado. Este contexto explica por qué es indispensable regularizar en septiembre la relación con el Fondo en los términos del artículo IV de su carta orgánica. La negativa, o la imposibilidad, de Kicillof para aceptar esa auditoría costó los US$ 4000 millones que debieron pagarse demás al Club de París. Son los sobreprecios de la mala praxis disfrazada de soberanía. La situación argentina ante esta asociación se definirá a comienzos de octubre, cuando la misión del FMI ya haya pasado por Buenos Aires. Sería un error, de todos modos, pensar que Macri piensa al Fondo como lazarillo para el ordenamiento de la economía. Tanto él como Malcorra pidieron a Kerry que avale el ingreso de la Argentina a la OCDE, un club de países desarrollados del que, en América del Sur, sólo forma parte Chile. Malcorra y Prat-Gay solicitaron la incorporación en junio. El gobierno de los Estados Unidos es el más reticente a aceptar nuevos socios. Prefiere que la auditoría económica siga en la órbita del Fondo. Simple: allí su poder es equivalente a su tamaño y a su cuota; en la OCDE, en cambio, cada país vale un voto. Cuando desembarque en Buenos Aires una misión del Fondo, el kirchnerismo denunciará una nueva traición a la patria. Sería un agravio para Rafael Correa y Evo Morales, que hace tiempo se encuadraron en el artículo IV. Sólo Venezuela quedó afuera. De ese país atribulado también se habló con Kerry. Macri y Malcorra corroboraron que Washington trata al régimen de Nicolás Maduro, a pesar de sus atrocidades, con prudencia. El secretario de Estado recomendó acompañar el diálogo entre el gobierno y la oposición, que hoy lidera José Luis Rodríguez Zapatero. Nada que sorprenda. Zapatero asumió esa tarea, que escandaliza al antichavista Felipe González, por pedido de Thomas Shannon, el diplomático al que Obama encargó monitorear la peripecia bolivariana. Por eso también Mariano Rajoy ofreció la embajada de su país para las conversaciones. Los resultados han sido, hasta ahora, nulos. Pero hay dos factores que mantienen la cautela demócrata. Un descalabro venezolano tendría consecuencias nefastas para todo el norte de América del Sur. En especial para Colombia, en cuya pacificación los Estados Unidos están más que empeñado. Un indicio: Kerry dejó en Buenos Aires una donación simbólica para equipar a los militares que intervendrán en ese proceso en el marco de la ONU. Además, si en Caracas se desencadenara un estallido, Trump tendría otro argumento para castigar la política internacional de sus rivales. Kerry, que es católico, confesó que simpatizaría con un mayor compromiso del Vaticano en las negociaciones venezolanas. Sobre todo porque el papa Francisco insinuó que le gustaría intervenir. El límite en este caso es Antonio Parolin, el cardenal secretario de Estado. Ex nuncio en Venezuela, Parolin no desea exponerse a que un fracaso condene a la Iglesia local a la persecución chavista. Con Kerry se coincidió en otra iniciativa: que la mediación sea acompañada por un grupo de países de la OEA. Es para sacarla de los límites de la Unasur, donde Maduro consigue algunas adhesiones. El tristísimo trance venezolano reapareció en Río de Janeiro. Macri dialogó con Temer sobre la crisis que se desató en el Mercosur por la presidencia rotativa. Brasil y la Argentina se niegan a que la ejerza Maduro. Paraguay va más allá: pretende expulsar a Venezuela por violar la cláusula democrática del Protocolo de Ushuaia. Temer y Macri acordaron lo que ya habían conversado sus ministros Malcorra y José Serra: que entre el viernes que viene y el próximo 23 se identifiquen los incumplimientos económicos que obligarían al chavismo a renunciar a la presidencia. Maduro tendría una coartada: echar la culpa a la Asamblea Nacional, dominada por la oposición, que no aprobó algunos de esos requisitos. Desde que el chavismo denunció el desplazamiento de Dilma Rousseff como un golpe, Brasil se ha propuesto que Venezuela no presida el Mercosur. Esa negativa es más urgente porque, en vez de fortalecerse, Temer se debilita. El viernes, cuando proclamó el inicio de los Juegos, se cuidó de que su imagen no apareciera en las pantallas. Sirvió de poco: apenas escuchó su voz, el estadio lo abucheó. Se ve que el pirotécnico estaba entrenado: ante el primer silbido, atronó con los fuegos artificiales. Igual es imposible ocultar el tamaño de la crisis. Kerry dejó el estadio antes de tiempo y se fue al aeropuerto sin estrechar la mano del presidente. Nada que sorprenda: mientras el Maracaná se electrizaba, salía a la calle la revista Veja con la cara de Temer en la tapa. El poderoso arrepentido Marcelo Odebrecht reveló que el reemplazante de Dilma también había recibido fondos de la corrupción para su campaña. La nave brasileña navega sin rumbo. Pero Macri igual es optimista. A la economía de Brasil parece alcanzarle con que no repongan a Rousseff para normalizarse. El dólar, en vez de llegar a 5 reales, como muchos vaticinaban, bajó de 4 a 3,20. Quiere decir que las exportaciones argentinas ganaron un 20% de competitividad sin que, en rigor, suceda nada. El Presidente sigue al minuto los altibajos brasileños. Como le ilustró con números a Kerry, son una variable estratégica para la recuperación local. El drama de Brasil sólo tiene un beneficio, simbólico, para la Argentina: la comparación. Macri puede ufanarse de ser el líder de un cambio consistente. Acaso quien mejor definió esa imagen fue Prat-Gay, hablando ante los ministros del G-7: «Macri representa lo contrario de lo que ustedes temen. El mundo está amenazado por el proteccionismo y el populismo. Y a Macri lo votaron para emancipar a la Argentina de esos males». Buen vendedor, Prat-Gay. Con el canciller de Obama sólo un tema estuvo ausente: la aspiración de Malcorra a la Secretaría General de la ONU. Washington no quiere abrir la boca sobre una cuestión que tiene a Macri cada día más inquieto. Sobre todo desde que Fulvio Pompeo le anunció que en la última votación Malcorra había salido tercera. El Presidente dudaba de que su ministra llegara tan lejos. Ahora Malcorra es la única mujer detrás de dos europeos: el portugués Antonio Guterres y el serbio Vuc Jeremic. Si la disputa queda bloqueada en el viejo continente, tal vez por el factor ruso, el camino podría despejarse para ella. Hasta ahora no hubo vetos. Pero en septiembre habrá otra votación. La carrera se definiría en octubre, cuando Rusia presida el Consejo de Seguridad. Hoy llega a Buenos Aires Ban Ki-moon, antiguo jefe de la canciller. Estará en el CARI. ¿Tocará el tema? Si Malcorra triunfara, Macri elevaría muchísimo su perfil externo. Aun cuando quede en la encrucijada, para él, más fastidiosa: la de tener que cambiar su gabinete.